Paraíso terrenal

Dame una sonrisa de complicidad.

Me pongo los cascos de música y elevo el volumen hasta límites insospechados, así nadie podrá molestarme en mi etapa de desconexión del mundo.

Ahora es cuando hago especial hincapié en el pasado, presente, o futuro y escribo en un folio en blanco las correlaciones entre estos tiempos.

Podría simplificar mi vida en un simple mote: Quiti.

Sí, todo eso es lo que he sido, soy y espero ser.

Mi vida en menos de un año ha dado un vuelco de 180º, o mejor dicho un giro superior a los 270º que marca la circunferia trigonométrica, y la verdad es que me alegro.

No puedo decir que antes haya tenido una vida aburrida, asqueada o inclusive horripilante, no, porque antes he vivido en el <> Y según la sociedad de hoy en día, es la mejor forma de ahorrarse disgustos, humillaciones o desventajas sociales... Pero yo ya me he cansado de seguir las reglas, de "se dice", "se hace", "se lleva"... Tan sólo tenemos una vida, y la tenemos que aprovechar a nuestra manera, no como los demás piensen que es la correcta. Ellos son dueños de sus decires o de sus actos, pero al igual yo soy dueña de mi propia vida no voy a permitir que nadie me diga lo que he de hacer o dejar de hacer.

Si por ser como soy tengo que renunciar a muchas cosas, renunciaré, pero lo más importante que tenemos es la felicidad, y creo que no hay mayor atentado que el de robar este bien a quien lo posee, siempre y cuando no dañemos la felicidad de otros.

Puede que esto suene totalmente filosófico, pero estoy en el camino de revolucionar mi vida, y no pienso decir en unos años ME ARREPIENTO de no haberlo hecho, porque quiero vivir, quiero disfrutar y quiero ser yo a mi manera, por y para siempre.

Tenemos un momento en nuestras vida en el cual decidimos un camino, y el mio está empezando a tomar forma... por eso te digo...

Dame una sonrisa de complicidad.